domingo, 9 de septiembre de 2018

FARIÑA




“O que teño que facer para non ter que ir ao mar”, se repetía cada mañana al despertar. Desde que escuchó por primera vez la letra de la canción de aquella narcoserie de televisión, basada en un libro secuestrado por la justicia, no podía quitársela de la cabeza. Su bisabuelo fue marino y se lo llevó la mar, a su abuelo igual y su padre, aunque seguía con ellos, toda la vida llevaba dejando con el corazón en un puño a su madre cada vez que salía a navegar. Él desde niño supo que no quería aquella vida para si, haría cualquier cosa por no tener que ir al mar. Y lo había conseguido.
No le faltaba el trabajo, no había nadie mejor en lo suyo en toda la zona de las Rías Baixas a Costa da Monte; aquel era su territorio. Todos le llamaban con el mismo problema, y es que si no se corta bien todo se va a la basura y son pérdidas.  Algunos llamaban a aquellas zonas de trabajo laboratorio, otros taller, pero poco importaba eso, muchas veces el mayor problema era llegar. Las sinuosas carreteras gallegas son infernales, menos mal que su todoterreno no le fallaba nunca. Recordó aquel día que tuvo que volver a casa de noche y estuvo a punto de despeñarse porque casi se queda dormido. Le habían llamado desesperados, tenían que entregar un encargo para el día siguiente y era imposible, el dinero no podían devolverlo porque ya lo habían invertido pero no podían cortar, y allí estaban con la mercancía en bruto. Aquel día salió cubierto de polvo blanco hasta las orejas, parecía un panadero. Se tocó la nariz con las manos manchadas y al verse en un espejo se dio cuenta que tenía aspecto de farlopero. Pero justó después los engranajes volvieron a girar, se oyó el agua correr, y las muelas cortaron y tallaron aquella pareja de progresivos de última generación para  que pudieron ser entregados a tiempo.
Era el mejor técnico en reparación de biseladoras  y nunca le faltaba el trabajo.

2 comentarios:

  1. Me gusta!!! ya creía que no iba a relacionarse con la óptica!!

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  2. Jajaja. ¡Eso nunca!, ya sabes lo que todos tienen en común 😉

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